martes, 24 de enero de 2012

Solo juega un corazon.

+¿Jugamos a un juego?
-Vale.
+Se trata de dibujar un corazón, muy grande y pintarlo de rojo entre los dos.Cuando ya lo hayamos acabado, nos pondremos en pie y nos lo pasaremos, tenemos que hacer que no se caiga.Cada vez nos iremos separando  más y tendremos que seguir pasándonoslo.Si se cae al suelo, se romperá y ya no habrá vuelta atrás.¿Qué te parece?
-Parece fácil...probemos.

Lo saben.

Sabemos que no somos perfectos,
pero juntos rozamos la perfección.

sábado, 21 de enero de 2012

+En una escala del 1 al 10, ¿cuánto me quieres?
-Mmm, 8.
+¿Solo 8?
-Si, solo 8, porque es con el único número que se puede hacer el número infinito.
+Shh, callate, mirame a los ojos y dime si de verdad me amas.
-Te amo.
+Mientes.

domingo, 15 de enero de 2012

Si estás mal, llora, desahógate, grita, corre, vuelve a llorar si hace falta. Pero quítatelo de dentro, no te lo tragues, no te pongas esa maldita máscara que intenta reflejar felicidad, porque aunque tú no lo creas, es mucho peor. No mientas diciendo que estás bien cuando en realidad estás mal, di la verdad, ¿qué delito tiene eso?, así, quizás no estarás sola en esto. Ignora esos comentarios o actos que te pueden herir, aunque te sea difícil, esos que sólo los pueden decir personas sin sentimientos. Y, cuando puedas levantarte, sola o acompañada, te darás cuenta de que el mundo tampoco está tan mal, que también se han de recordar los buenos momentos, que seguro que son más que los malos.Aprenderás a ver que la vida, sí que vale la pena, todo vale la pena, incluso las personas crueles, si no, ¿de quién aprenderíamos a ser fuertes?, incluso lo más insignificante puede tener su valor, entonces, piensa, que la vida no esta hecha para malgastarla tragándote los problemas y acumularlos; la vida, está para vivirla, disfrutarla, para saltar alto, tanto, que así puedas esquivar esos malditos obstáculos, y, si caes, tranquila, si queires vas a levantarte, no todo puede ser bueno ¿no? No todo es dulce, también hay cosas amargas, y no pocas, pero si les pones un poco de azúcar seguro que tiene mejor sabor.
Las cosas no son siempre como uno quiere. Dicen que lo que no te mata te hace más fuerte. Que el que la sigue la consigue y que antes de rendirte te acuerdes por lo que estás luchando. Dicen que hay que aprovechar la vida que son dos días, que hay que vivir el momento. Que quién te critica te hace importante, que lo que se ama no se olvida, que el amor no son promesas sino hechos, que nunca digas nunca, que las reglas están para romperlas, que es mejor no confiar en nadie, que no hay mal que por bien no venga, que al mal tiempo buena cara, que hay que dar segundas oportunidades, que quién juega con fuego se quema, que con quien te ven te comparan, que todos los hombres son iguales y más vale pájaro en mano que ciento volando, que la suerte de la fea la guapa la desea, ojos que no ven corazón que no siente, y que nada es para siempre.

Seguiré creyendo que vivo en un sueño.

Siempre seré una niña, que corretea hacia la libertad, que intenta tocar el cielo con sus propias manos, que cuando se cae llora pero al instante se ríe y se vuelve a levantar, siempre seré una ilusa y sobretodo inocente y algo tozuda. Nunca veré la mentira y la maldad de las personas, soñaré un sueño perfecto, deseando que se cumpla. Siempre, seré, esa niña, que anda por las nubes, que no se preocupa por su destino. Una niña, que aunque pasen los años, aunque crezca y mi cuerpo cambie, aunque me maquille y vista como una adulta, en mi interior siempre estará la niña de siempre, la niña que nunca ha dejado de luchar y de creer, en que el mundo es un sueño, del que todos se despertaran algún día.

No me olvides, te lo pido.


sábado, 14 de enero de 2012

Solo tú.

Siempre hay recuerdos buenos contigo. No sé como hemos hecho para querernos tanto. No sé hasta el punto que hemos llegado de no poder vivir el uno sin el otro. Que sin ti sé que me muero, y que no puedo respirar. Me falta el oxígeno y el hidrógeno si no te tengo cerca. Que cuándo te enfadas se me acaba el mundo. Necesito ir de tu mano a cualquier parte del planeta, incluso a cualquier parte del universo, porque sé que así sera todo más fácil. Necesito que me susurres al oído mil veces que me quieres, y que yo te responda de la misma manera que yo te quiero más y así empezar una discusión. El sentir que nos asfixiamos si no nos tenemos cerca. Cuándo nos damos la razón al hablar de que puede llegar el día en que nos perdamos mutuamente. El asegurar que aunque nuestra historia tenga un final, bonito, nunca la olvidaremos y la recordaremos como la mas intensa. Y, ¿Sabes que es lo mejor? Que me apostaría el cuerpo entero a que nadie te querrá como lo hago yo, y que en ningún sitio del mundo existe un amor tan intenso como el nuestro. Porque te necesito como el respirar. Porque siento que contigo me da igual tirarme desde lo alto de un precipicio porque tu estarás abajo para que la caída no sea nada. Porque tú eres la única razón por la que sonrío. Porque eres tú, tú, tú y... tú. ¡Ah, se me olvidaba! ¡QUE ERES TÚ Y SÓLO TÚ EN MI VIDA!

Sabes que es él.

Y de repente ocurre. Le conoces. Te enamoras de cada sonrisa. De cada tontería. De sus chistes, de sus gracias. De la forma en la que se peina. Las caras que te pone. Sus miradas, forma de caminar, de vestir. De sus gestos. Sus manias. Sus canciones favoritas. Sus detalles. De cada lunar que tiene en cada parte de su cuerpo. La manera tan peculiar que tiene de quererte, de llamarte " mi niña ". Y todo cambia. Para bien o para mal. Y sabes que es él, y nadie más. Y te acuerdas del primer beso, la primera tarde, la primera frase. El primer te quiero. Cuando te enseño a creer en ti, a valorarte más. A ver la vida desde la curva de su sonrisa. Y cuando piensas olvidarle, se te olvida. Y empiezas de nuevo. A recordar, y te das cuenta que sus chistes nunca dejarán de tener gracia, y que desde aquel dia, no solamente le perdiste a él sino que también perdiste totalmente los cinco sentidos. Y que tu vida, hagas lo que hagas gira entorno a todos y cada uno de esos momentos.

Él.

-Conectate, conectate, conectate...
Él se ha conectado. Abres su ventana de conversación, sonríes al ver su foto de perfil en pequeñito al lado de la barra de tareas. La abres, y la minimizas. No la quitas del todo, la dejas ahí, a la espera de ver ese circulo verde con un 1 al lado, señal de que esa persona te ha hablado. Esperas. Cambias tu estado, tu tablon lo actualizas, le das a inicio cada 2 minutos, te pones a mirar fotos, te unes a páginas y empiezas a etiquetarte en fotos, simplemente para que, cuando el le de a inicio, te vea, vea que estás conectada. Tus visitas suben como la espuma, está claro que estás el primero. Continúas con estos cambios, abandonando a los demás que sí que tienen tiempo para hablarte. Cierras su ventana, indignada. Pero bajas la lista del chat hasta su nombre, observando si sigue ahí. Hasta que no puedes más y la vuelves a abrir, a la espera de si eso consigue algo. Nada. Los demás siguen hablando, impacientes. No respondes, no tienes ganas. Sólo lo esperas a el.
Son la 2 de la mañana, estás cansada, mañana madrugas, pero no te vas, porque el sigue conectado, y aún tienes la esperanza de que te hable. Entonces se te ocurre la estúpida idea de que quizás se lo ha dejado encendido y en realidad no está. Esa idea te acompaña el cuarto de hora siguiente, con 4 estados, 10 tablones, 20 páginas y 8 comentarios nuevos. Esa idea es lo único que te mantiene despierto.
Le das a actualizar la página, el aparece el primero. Ha cambiado el estado. Le ha comentado una chica.Él ha respondido. Está. Está, hablando con otra. Está, pero no conmigo. Entonces cambias radicalmente de pensamiento.
-Desconectate, desconectate, desconectate... si no vas a hablar conmigo, tampoco con ella.
Y deseas con todas tus fuerzas que se vaya, para que paren de hablar. Y cierras su ventana con la esperanza de que al dia siguiente te hablara, pero sigue la lista bajada en su nombre. El número de conectados baja. Miras. Se ha ido. Se ha ido el. Y de repente, te arrepientes de no haberle hablado.

Tú.

No necesito una historia como la de un cuento de hadas, ni un final en el que todos coman perdices. Necesito que me des una historia única, diferente, y nuestra. No necesito que aquel que me bese lo haga igual que tú, ni el otro, necesito que los demas sean todos iguales, y tú diferente, para poder alejarme de ti y tener más ganas de besarte. No necesito esas velitas, luz tenue, y musica bajita, necesito que entres por la puerta, que me cogas y me empotres contra la pared, diciendome lo mucho que me has echado de menos en cada mordisco. Algún abrazo tonto necesitaré, pero te aseguro que donde estén las miradas de deseo, y las sonrisas de complicidad sobra lo demás. Y poco a poco tomar la inciativa, no necesito esas historias con las que sueñan las adolescentes pegajosas, necesito fuerza y acción, llegar al cielo, y ver las estrellas.

Solo escucha.


Todo lo que tienes que hacer es ponerte los cascos, tirarte al suelo, y escuchar el CD de tu vida. Canción tras canción, no puedes saltarte ninguna, todas han pasado, y de una forma u otra servirán para seguir adelante. No te arrepientas, no te juzgues, se quien eres. Y no hay nada mejor para el mundo. Pausa, rebobinar, play, y más y más aún. Nunca pares la música, no dejes de descubrir sonidos para lograr explicar el caos que tienes dentro.
Y si te sale una lágrima cuando lo escuchas, no tengas miedo, es como la lágrima de un fan cuando escucha su canción preferida.

3MSC.

-Soy feliz. Jamás me he sentido tan bien, ¿y tú?
-¿Yo? Estoy de maravilla
-¿Hasta el punto de llegar a tocar el cielo con un dedo?
-No, así no.
-¿Ah, no?
-Mucho más. Al menos tres metros sobre el cielo.